¿Estas financieramente “apretado” por el cuidado de tus hijos, así como de tus padres ancianos? Si es así, tú formas parte de la llamada "generación sándwich".
No hay una edad específica para ser parte de la
generación sándwich, sólo es necesario cumplir con la condición de tener
dependientes económicos de otras generaciones. Sin embargo, especialistas en
finanzas prácticas, indican que las personas de 40 a 60 años se encuentran más
expuestas a esta situación. Es frecuente encontrar en la actualidad personas
entre 40 y 60 años que se sienten atrapadas en este sándwich generacional,
tratando de mantener una familia y cuidar a sus seres queridos de edad
avanzada, lo cual las somete a una presión económica importante.
Y ésta no es una situación poco usual. Según datos
del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), de cada 100 hogares
en México, 27 están integrados por al menos una persona de 60 años o más.
A esto se le suma que, aproximadamente, tres de
cada 10 adultos mayores no cuentan con seguridad social, es decir, no reciben
pensión ni atención médica gratuita, por lo que los hijos deben asumir todos
los gastos de manutención, atención médica y medicamentos de sus padres.
Las responsabilidades financieras a las que te
enfrentas son muchas: Invertir tiempo en el desarrollo de tu carrera, pagar para
la educación de un hijo, pagar para el cuidado de un padre anciano, ahorrar
para tu jubilación, etc.
Formar parte de la generación sándwich pone en
riesgo las finanzas familiares y tu propio ahorro para el retiro. Esto
incrementa la probabilidad de que tú, a su vez, te conviertas en dependiente
económico de tus hijos cuando llegues a la edad de la jubilación.
¿Cómo puedo hacer para que todo me salga bien, sin
sentirme atrapado entre la espada y la pared? En cada etapa de tu vida, la
planificación puede ayudarte a desarrollar estrategias para el mejor uso de tu
tiempo y de tus recursos financieros para así alcanzar tus metas.
La crianza de los hijos
Todos los padres quieren lo mejor para sus hijos, y
una buena educación fomenta el éxito. Pero con el incremento en los costos de
las colegiaturas, la universidad puede parecer algo prohibitivo. ¿Cómo puedes
enfrentar este reto financiero? Hay varias opciones: becas, préstamos y ayuda
financiera. Para completar tu plan, puedes comenzar a ahorrar lo que puedas lo
más pronto posible. Te sorprenderías saber lo que podrías lograr con un enfoque
disciplinado y el tiempo de tu lado. Otra opción es contratar un plan
educacional con una aseguradora - Seguros Monterrey New York Life tiene un plan
educacional llamado Segubeca el cual te garantiza que si tu llegaras a fallecer
antes de que tu hijo alcance la universidad, no solo se paga la suma asegurada
contratada, sino que al vencimiento del plazo se entrega el dinero para la
universidad de tu hijo.
El cuidado de padres ancianos
Mientras crecen a la familia y buscan el desarrollo
de una carrera profesional, los padres son a menudo llamados a cuidar de sus padres
ancianos, familiares y seres queridos. Si actualmente este escenario no es una
realidad para ti, puede ser en el futuro, y es muy probable que te enfrentes a las
limitaciones de tiempo, así como una mayor carga financiera. La mayoría de la
gente no puede permitirse el lujo de poner su trabajo en espera para cuidar o
pagar por el cuidado prolongado de sus padres en edad avanzada. El seguro de
atención médica ( Gastos Médicos Mayores
) puede ayudar a aliviar estos problemas para ti y tus seres queridos.
Un seguro de vida también te puede ayudar a preservar los
activos y cumplir con tus metas de planificación de sucesión, tales como dejar
un legado para tus hijos y nietos. Al igual que con la mayoría de los tipos de
seguro, es mucho más rentable obtener la cobertura antes de que usted o
un ser querido la necesite.
Tú primero
Los padres a menudo tienen una tendencia inherente
a poner las necesidades de los demás antes que las propias. En términos de
seguridad financiera, esto puede ser un error devastador. En la jubilación, las
personas tienden a generar ingresos a partir de tres fuentes principales:
Seguridad Social, planes de jubilación patrocinadas por la empresa y ahorros
personales.
A diferencia de los apoyos disponibles para estudiar
la universidad, no hay préstamos o ayuda financiera para la jubilación. Así que
de nuevo, es importante para salvar lo que pueda cuando pueda. Contribuye al
plan de jubilación de tu empresa y maximiza tus aportaciones. Además, planea
para lo inesperado. El seguro por incapacidad total y permanente te puede
ayudar reemplazar tus ingresos en el caso de un accidente o enfermedad.
Una buena opción es contratar tu propio Plan Personal de Retiro - PPR. Este producto financiero es una
cuenta individual destinada a recibir, administrar y obtener los máximos
rendimientos de recursos para el retiro. En México, los PPR son manejados por operadoras de fondos de inversión,
aseguradoras e instituciones bancarias. Otra
ventaja significativa de los PPR es
que, al igual que los aportes voluntarios a las Afores, son deducibles para
personas físicas que pagan el Impuesto sobre la Renta (ISR).
Mirando hacia el futuro
Las
obligaciones familiares pueden ser un segundo trabajo muy exigente. Con una
previsión, planificación y ayuda profesional, tú puedes minimizar el estrés
emocional y financiero, y diseñar un plan a la medida a largo plazo para tu
situación específica.
0 comentarios :
Publicar un comentario